Siempre supe que eras tú, desde la primera vez que te vi en el camping. Todo fue muy rápido; llegaste, y nada más bajarte del coche entendí a lo que te refieres hoy con el "chin". Te veía inalcanzable, alguien increíble que transmite felicidad allá donde va; era como si todo tu alrededor brillara con colores cálidos al estar presente. Sin embargo, no fue hasta más tarde cuando el destino quiso unirnos. Por algún motivo, los dos, con destinos distintos, acabamos en el mismo lugar, compartiendo los mismos sentimientos. Entonces fue cuando aprecié de cerca tus ojos azules, los mismos que me cautivaron, y en un instante supe que mi vida no estaría completa si tú no estabas en ella. Desde entonces, mi corazón y mi alma se unieron para amarte de una forma en la que nadie más podrá hacerlo en esta vida. Era como si todo lo vivido hasta ese momento careciera de sentido. Fue cuando me dijiste que sí, que experimenté lo que significa ser feliz de verdad. Siempre había pensado que no necesitaba a nadie para estar bien, pero desde que estoy contigo, entiendo lo que es sentirme completo. Al principio teníamos miedo de que nos descubrieran, y deseábamos vernos en secreto. Pero nuestras miradas nos delataron, y nuestras familias se dieron cuenta. Así comenzó la etapa más bonita de mi vida; contigo a mi lado. A pesar de todos los problemas que han surgido, tengo claro que eres el amor de mi vida. 🤍